Una barra con bancos para menos de 10 personas. Un pequeño salón a media luz, pero que ilumina lo importante; una estructura de madera que luce a la espalda del mesero y que está llena con jarras para servir sake. En un rincón, se mueve sutilmente una cortina azul con peces koi, por ahí salen los platos de ramen.
Teteras pequeñas y pesadas, con vasos en los que se asoma una flor de loto al tomar el té. Cuadros con caricaturas japonesas, Godzilla y hasta figuras discretas de Dragón Ball. Es un poco el ambiente que te envuelve en el nuevo lugar japonés de la colonia Roma en la Ciudad de México, Sōōp Noodle Bar.
Tanto la decoración como las recetas y la dinámica que hay en la parte de adentro de Sōōp están inspiradas en los comedores japoneses antiguos llamados sukiya que, de acuerdo con el personal de este restaurante en México, podían visitarse por ahí de 1920. Tiene la particularidad de generar espacios íntimos, diseñados para una experiencia más personalizada y enfocada en la atención al detalle. Aquí el tiempo a veces se disuelve.
“Está inspirado en esos lugares donde se tomaban refrigerios cortos o bebidas y platos en las noches. Barras muy breves hechas 100% de madera, con elementos japoneses y orientales”, contó para Aderezo uno de los encargados del lugar.
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¿Qué comer en Sōōp?
Como su nombre adelanta, el restaurante tiene como protagonista a la sopa, o sea, el ramen. Hay en la carta cinco opciones y una de ellas totalmente vegana.
Antes de comenzar con lo destacado del menú, un poco de contexto: Aunque existen varias historias alrededor del ramen, lo cierto es que llegó a la capital japonesa en el siglo XVII, cuando estalló la guerra de dinastías y algunos chinos tuvieron que migrar para refugiarse y sobrevivir.
Ahora sí, el menú ideal en Sōōp
–Ensalada de pepino. Es ácida y te hace salivar. Tiene dos tipos de ajonjolí arriba con un poco de chile en polvo. No podrás dejar de comerla.
-Dumplings veggie o cerdo. Un clásico de la comida asiática. Vienen cinco piezas en fila coronadas con cilantro. Se preparan artesanalmente y todos los días; eso sí, si buscas un sabor más intenso, definitivamente pide los de cerdo
–Salmón y espárragos. La primera sorpresa de la noche respecto a entradas. Las texturas y toque jugoso que logran los espárragos blanqueados envueltos en salmón son memorables. “Van caramelizados en una salsa coreana y se terminan con un poco de cilantro, ajonjolí y ralladura de limón Eureka”, nos explicaron.
-Sando Katsu. Hace un par de años los sándwiches japoneses llegaron a México para quedarse. Se caracterizan por su pan esponjoso y porque no tienen orillas. En Sōōp lo sirven en un plato de madera diseñado para que el sándwich quepa a la perfección luego de partirlo en cuatro. En sus ingredientes encontrarás mayonesa japonesa, milanesa de cerdo, zanahoria y calabaza. El pan es de masa madre.
-Ahora sí, el ramen. Hay cinco recetas en la carta, pero te contamos de tres. Primero, el Shoyu, el más tradicional. Tiene fondo de pollo, pero lleva cerdo, germen y las algas que caracterizan el platillo. Además, el fideo es el tradicional.
También está el red curry ramen, que lleva leche de coco, calabaza mantequilla, col de Bruselas y aceite verde; finalmente, el soft shell crab con udon, un tipo de fideo que es más grueso y más suave. Se acompaña también con verduras tempura. Una exploración interesante de sabores, texturas y colores.
-Brûlée de taro. El postre sabe mejor con sake. La descripción de esta dupla se queda corta, tienes que probarla. Además, flamean al momento.
Sombra, el speakeasy futurista de Sōōp
Una cortina en el acogedor restaurante asiático que es Sōōp se convierte en la puerta a un bar oculto, es un portal al futuro en el año 2044.
La coctelería del lugar sigue tendencias, pero impone las propias. Encontrarás ingredientes como sauco, palo santo o licor de menta. Además, un juego constante con la ausencia de color, pero la explosión de sabores.
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“El interior de Sombra era una fusión ecléctica de diseño futurista y piedra antigua, con flora bioluminiscente proyectando un brillo de otro mundo en las paredes de la caverna. El aire estaba impregnado del aroma de los licores añejos y los cuentos susurrados de rebelión”, cuentan sobre el concepto.
Dónde
Orizaba 96, Roma Norte, Ciudad de México. Abierto a partir de las 14:00 horas
Más detalles: Instagram @soopnoodlebar