Por Domingo Fernández
Los niños que consumen bebidas azucaradas con frecuencia pueden tener un mayor riesgo de padecer problemas de aprendizaje en la edad adulta, esto debido a que afecta el hipocampo, estructura del cerebro que regula el estímulo, emociones y memoria.
La investigación fue publicada en la revista Nature después que especialistas concluyeron los estudios de laboratorio (con ratas), por lo que alertaron sobre el problema del consumo desmedido de azúcar en edades tempranas.
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Los especialistas creen que el azúcar altera el microbioma intestinal de las personas y, a su vez, modifica los genes en función del deterioro del hipocampo, explicó la autora principal del estudio, la doctora en nutrición Emily Noble, de la Universidad de Georgia.
Adicionalmente estudiaron los genes en los cerebros de las ratas y descubrieron que eran diferentes de haber sido alimentadas con bebidas azucaradas, los genes afectados controlan cómo las células nerviosas transmiten señales eléctricas a otras células nerviosas y de qué modo envían señales moleculares internamente.
Si bien el estudio se realizó en ratas, los investigadores consideran que los hallazgos también podrían aplicarse a los humanos, en el futuro el equipo espera determinar si los cambios de hábitos, como llevar adelante una dieta más saludable o aumentar el ejercicio, puede revertir el daño a la memoria causado por el consumo elevado de azúcar en una etapa temprana de la vida.
Para las autoridades sanitarias, es recomendable limitar el consumo de bebidas azucaradas y de alimentos con elevado contenido de grasas, azúcar y sal; golosinas, amasados de pastelería y productos de copetín (como palitos salados, papas fritas de paquete, etcétera); limitar el consumo de bebidas azucaradas y la cantidad de dulce a las infusiones; limitar el consumo de manteca, margarina, grasa animal y crema de leche.
No obstante si se elige consumirlos la sugerencia es hacerlo en cantidades pequeñas, porque en exceso de estos alimentos también predispone a la obesidad, hipertensión, diabetes y enfermedades cardiovasculares, entre otras.
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