Si estás acostumbrado a comer en tu escritorio durante las horas laborales o de plano ni comes, esta información es para ti: aunque no lo creas, podrías estar bloqueando tus procesos creativos, digestión e incluso salud mental.
Si eres de los que anda con el tupper encima del escritorio, come cualquier cosa de la comida rápida por atender pendientes y no se da un respiro, ¡aguas! comienza a cuidar tu alimentación. Además, te contamos en donde tienen esta acción prohibida.
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Razones para no comer frente al escritorio
El cerebro no procesa todo lo que está comiendo
Es posible que se pierda la noción de la comida que se está ingiriendo, ya que no se puede tomar conciencia de los alimentos al momento; no se logra quedar satisfecho o provoca tener hambre al poco tiempo.
Problemas de digestión
Además de mantener una postura con poco movimiento durante gran parte del día, es probable que la forma de masticar e ingerir no sea la más acertada; sumando la tensión del trabajo.
Reduce la producción
Si decides establecer tu hora de comida – descanso en el mismo espacio donde trabajas, es probable que la cabeza y el resto del cuerpo no rindan de la mejor manera. Es necesario darte una pausa o tomar aire fresco para despejar la mente y recargar energía.
Es poco higiénico
Definitivamente la comida que ingreses al organismo tendrá bacterias del escritorio, ratón, así como del teclado y la oficina. Probablemente se pueda desatar alguna enfermedad.
No se disfrutan los alimentos
El área de trabajo limita poder concentrarse en los sabores, texturas y más, haciendo a un lado la plena conciencia en los platillos que se consumen.
Según el Observatorio del Instituto para el Futuro de la Educación, existen culturas y países donde la hora de la comida es intocable, ya que es un momento para desconectar del trabajo y conectar con uno mismo. Por ejemplo, en Francia se considera ilegal comer en el escritorio de trabajo.
En este país está prohibido desde hace más de 100 años
Desde 1894 el gobierno francés puso en marcha en su código laboral, una sección que estipulaba que comer en el trabajo es perjudicial para la salud. Los componentes tóxicos de las fábricas donde se laboraba, eran la razón suficiente para que salieran mínimo un par de horas.
Sin embargo, debido al Covid-19 se modificó la ley en febrero del 2021, permitiendo comer en áreas de trabajo. Y esto tampoco duró mucho, ya que en el artículo Covid-19, Workday Lunch and the French Labor Code, de Martin Bruegel, historiador del Instituto Nacional de Investigación para la Agricultura, la Alimentación y el Medio Ambiente en Francia, defiende el propósito histórico de la prohibición de comer frente al escritorio, ya que esto mejora la productividad y bienestar. “La gente es simplemente más feliz cuando se toma un tiempo de inactividad durante la jornada laboral”, argumenta Bruegel.
México… ¿un país trabajador?
Desafortunadamente en Latinoamérica existe una carente relación entre el trabajo y las leyes laborales que ayudan al trabajador. De acuerdo con datos de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), Colombia, México y Costa Rica son los países que acumulan más horas trabajadas al año en el mundo. México está en segundo lugar con 2124 horas al año (40.8 horas a la semana).
Es importante tomar como referencia que la OCDE establece que las horas laborables preferibles son de 1687 horas al año, y que Alemania, un país destacado por su productividad laboral, está en el último lugar de la tabla con 1332 horas al año (25.6 horas a la semana).
Ahora ¿podrás dedicarle el tiempo necesario a tu hora de comida? Una ventaja es que realizarla podría ayudar a desenvolverte con tus compañeros de trabajo y a crear lazos.
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