Revelada por primera vez en abril del 2021, es la historia de dos grandes creadores: Lady Gaga y Dom Pérignon, colaboración impulsada por una libertad creativa.
Por su lado, la intérprete de Bad romance busca inspirar a otros a soñar, experimentar, expresarse, mientras que la champagne, explora perpetuamente el borde de la creación, revelando la armonía de una naturaleza, un clima en constante cambio y las limitaciones únicas que trae cada año.
Ambos comparten una conexión profunda: inspirar al mundo a superarse, bajo la filosofía “la inspiración creativa no es una elección sino un impulso irrefrenable que nos sostiene, nos mantiene vivos, nos da la energía para liberarnos y seguir poniendo a prueba nuestros límites”.
Esta colaboración se ha transformado en una campaña de marca artística y una escultura de edición limitada diseñada por la cantante, quien ha firmado una botella de edición limitada de Dom Pérignon Vintage 2010 y Rosé Vintage 2006 en estuches exclusivos y llenos de creatividad.
Todos los procesos creativos tienen sus limitaciones. Para Dom Pérignon, es el compromiso absoluto de crear cada año, sean cuales sean los retos.
De esta forma, además de ofrecer un sofisticado champagne, este trabajo colaborativo impulsa la libertad creativa mientras motiva a la gente a soñar y creer que todo es posible.
Conoce las ediciones
Dom Pérignon Vintage 2010
El aroma de Dom Pérignon Vintage 2010 evoca tanto la frescura de un jardín inglés después de la lluvia, como la exuberancia de un jardín tropical, sintiendo en el paladar una profundidad terrosa que traza una presencia sólida y acogedora.
El aroma de Dom Pérignon Vintage 2010 evoca tanto la frescura de un jardín inglés después de la lluvia, como la exuberancia de un jardín tropical, sintiendo en el paladar una profundidad terrosa que traza una presencia sólida y acogedora.
Dom Pérignon Rosé Vintage 2006
Cuando se decide hacer Dom Pérignon Rosé, se deja ver una declaración de libertad para dejar de lado las convenciones y superar sus propios límites, aprovechando el tinto de la uva pinot noir y capturando su poder vital en un conjunto audaz y asertivo.
El cautivador bouquet de Dom Pérignon Rosé Vintage 2006, maduro y profundo, es el preludio de una ola envolvente que es a la vez crujiente, firme y jugosa en el paladar. Esta energía, teñida de sensualidad y misterio, nos lleva al sorprendente final salino.
Lee también
- Estos artistas tienen su propia marca de tequila
- Perrier y su botella más artística hecha por Murakami
- La chef Martha Ortíz ofrecerá nuevos artes en “We Eat Color”
Y para llegarte por el oído, escucha nuestro podcast de Aderezo:
También visita nuestro perfil de Instagram: