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Foto. Olin Mendoza.

¡El matcha azul NO existe!

Descubre que hay detrás de la tendencia del match en nuestra columna del té

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Bebidas azules, vasos que parecen tener un cielo azul, bowls azules, panes y galletas azules… Instagram y tiktok se pintaron de azul y de repente ¡magia, todo se vuelve morado con unas gotas de limón! Seguro esto te parece familiar, así como el té azul y el matcha azul ¿cierto? Pues lamento romperte el corazón, pero esto NO es té, estas llamativas recetas llenas de color tienen como principal ingrediente una tisana. Hoy te cuento qué es, cómo usarla y llenar tu vida con mágicas tonalidades azules-moradas.

Se trata de la bella flor “Clitoria Ternatea” de color azul intenso, que también podemos encontrar con nombres como blue buttterfly pea, campanilla, guisante de mariposa o conchita azul, que brota de una enredadera perteneciente a la familia de las fabáceas. Se trata de una planta originaria de Asia ecuatorial, cuyo cultivo se ha extendido a África, América y Australia. En el sudeste asiático se utiliza para pigmentar arroz glutinoso, en Tailandia y Vietnam se consume como infusión y se acostumbra a mezclarla con miel y limón. Su color azul es el resultado del alto contenido de polifenoles, especialmente antocianinas glucosiladas de delfinidina y malvidina, kaempherol y ternatinas, los polifenoles dotan a esta flor de antioxidantes. Entre otros beneficios que se presumen de la Clitoria Ternatea tenemos las de mejorar las funciones cognitivas, relajantes, ansiolíticas y antidepresivas.

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Este vibrante color reacciona al pH, cambiando de azul a morado al agregar zumo de algún cítrico o medio ácido y esta es la principal razón por la que ha tomado fuerza dentro del mundo gastronómico, especialmente en bebidas. Y claramente, nació la idea de molerla y llamar a este polvo como “matcha azul” con fines mercantiles, pero, para los que tenemos claro que únicamente de la planta Camellia Sinensis se puede producir té y que éste nace a partir de pulverizar Clitoria Ternatea, sabemos que no se trata de un té, ni de una versión azul del matcha ¡Simplemente no es té!

Foto. Olin Mendoza.

Y aunque se puede batir en un chawan con ayuda de un chasen, convertir en un latte o utilizarse como un matcha, no debemos confundirnos. Recordemos que como les platiqué en “¿Por qué el matcha de repente se puso de moda?” de forma “sencilla” podemos definir al matcha como un té verde pulverizado, aunque no todos los tés verdes pulverizados son matcha ¡mucho menos podemos llamar matcha al resultado de pulverizar cualquier otro botánico! Y si nos vamos al concepto japonés de matcha, en donde la materia prima es especificamente tencha, bueno, ni hablar de que la Clitoria Ternatea molida, a pesar de ser un gran producto regalo de la madre Naturaleza, se pueda llamar matcha azul.

Pero bueno, ahora que todos sabemos que estos polvos mágicos color azul están llenos de beneficios, hablemos del perfil aromático y sutil sabor que recuerdan al chícharo deshidratadoy notas a madera, musgo y tierra.  Lo anterior permite que la Clitoria Ternatea, ya sea en flor entera o pulverizada la podamos mezclar con algo que enriquezca la experiencia aromática, como lavanda, lemongrass, cardamomo, menta, etc. A mí me gusta combinarla con otras tisanas o blends que resultan en licores claros, con té blanco, verde y wulong de baja oxidación.

En Quinto.mx puedes encontrar Clitoria Ternatea en ambas presentaciones: Thai blue butterfly (flor entera) y Thai Blue Stardust (flor pulverizada). Y te comparto tres opciones con las que me encanta mezclarlo:

  1. Remedio De La Abuela: Escaramujos, cáscaras de cítricos, manzanilla, lemongrass, hibisco y menta
  2. Strawberry-Mint Cooler: Menta, fresa, manzana, cáscara de frijol, hojas de bayas, hojas de zarzamora y hojas de grosella negra
  3. Alba Grey: Té blanco, té verde, lemongrass, algarrobo, naranja, pétalos de rosa, bergamota, pétalos de aciano y limón.

Espero que ahora llenes tu vida de mucho azul y tu cuerpo de antioxidantes. Pero recuerda que no es té ni matcha azul ¡es la misión de nosotros los #tealovers cambiar al mundo un cuenco a la vez!

Abrazos en taza, Denisse Díaz

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