La Año Nuevo ha llegado. Esa época de festejar, de recordar las cosas buenas que tenemos en la vida y de celebrar. Se acerca el día y el momento de pasar en familia una cena o comida en casa, en compañía de nuestros seres queridos; y para este momento seguramente también habremos decidido brindar con un buen vino. No todos los días es Año Nuevo. Por tanto, el día de hoy quiero hacer algunas recomendaciones para dicha ocasión, pero que al mismo tiempo siguen siendo relativamente accesibles en términos de precio. Como he mencionado anteriormente, en mi opinión los vinos alcanzan su punto óptimo de precio calidad entre los 60 y 80 dólares. Más allá de eso, creo que estamos pagando una marca determinada y no el vino como tal.
Primero hablaremos de los vinos blancos. En esta ocasión quiero recomendarles un vino de la región de Francia conocida como “Mersault”. Esta zona se encuentra en la Borgoña y serán vinos de alta calidad hechos con la uva Chardonnay. Suelen tener cuerpo robusto, mucha textura, un cierto nivel de maduración y añejamiento en barrica y por ende, sus sabores serán de fruta madura (durazno, melón) de almendra, nuez y de miel. Este toque tostado lo hará sumamente especial. Si bien no son vinos para consumir a diario, ciertamente son vinos que, por su calidad, pueden conseguirse a un precio razonable y nos harán lucir enormemente. Además, por los sabores descritos, acompañarán muy bien a los platillos navideños; y por su cuerpo robusto deberán servirse ligeramente a menor temperatura (pero no totalmente fríos).
El segundo tipo de vino para este Año Nuevo será el tinto. En esta ocasión les quiero recomendar los vinos españoles de la región de Toro. Relativamente cerca de la zona vitivinícola de la Ribera del Duero, serán vinos hechos con uva Tempranillo (o una variedad cercana) y que por su clima cálido y terreno, serán vinos también robustos, con sabores afrutados y que combinarán excelentemente con la comida típica de Año Nuevo. Estos vinos suelen tener aromas y sabores de zarzamora, arándano, ciruela negra, higo, chocolate, madera, etc. Debido a su procedencia, podemos conseguir estos vinos también a un precio relativamente accesible.
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En tercer lugar, quiero hablar de un vino de postre de la región de Sauternes, en Francia (específicamente en Burdeos). Estos vinos estarán hechos con las uvas Sauvignon Blanc, Semillon y Muscadelle (uvas blancas). Debido al proceso en que estos vinos se elaboran, serán dulces y serán perfectos para los postres. Tienen además una alta acidez que los hará sumamente balanceados y que por su elevada calidad, serán ideales para Año Nuevo. Su precio, al igual que las recomendaciones anteriores, estará en el mismo rango. Este tipo de vinos también se podrá conseguir si vienen de aquella región de Hungría conocida como Tokaj (en Budapest suelen llamarle a este el “vino de reyes y el rey de los vinos” por su dulzor y alta calidad).
En resumidas cuentas, como lo hemos dicho en otros momentos, se trata de explorar, de probar y de beber aquello que nos hace más felices. Finalmente estamos celebrando. Nos leemos pronto y mientras tanto, felices fiestas para todos.