¡Casi gemelos! Cómo diferencias entre tíbicos y búlgaros

Si últimamente has sentido que tu flora intestinal necesita una ayudadita, por acá te dejamos algunos consejos que te echaran la mano con la comilona que se aproxima.

¿Has escuchado hablar de los búlgaros? Se tratan de un producto fermentado que contiene ácidos esenciales para el organismo, así como vitaminas y minerales y existen dos tipos, los de leche y agua, sin embargo ¿cuáles son mejores para la salud?

La principal diferencia es el medio en que son cultivadas las bacterias, inclusive hay búlgaros que se desarrollan en el agua de coco, pero los microorganismos elaborados con agua (para el tradicional tepache) son conocidos como hongos tibicos, aunque el sabor y las propiedades son similares en ambos casos.

Su apariencia es parecida, los búlgaros de agua son como de leche son granos blancos que se parecen a mini coliflores, granos de arroz cocido o palomitas de maíz, aparte de que cuentan con un olor similar al que tienen otros productos lácteos como queso.

Estos tienen que ser sumergidos en leche o agua para que se reproduzcan y fermenten el líquido a su alrededor, lo cual hace que adopte las propiedades ya mencionadas.

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Después se deben filtrar con un colador o tela y posteriormente guardarlos en el refrigerador o en un sitio oscuro.

En cuanto a sus beneficios para la salud, ambas variedades proporcionan las mismas prestaciones que es controlar infecciones o padecimientos gastrointestinales como diarrea, estreñimiento o colitis, además de que ayudan a regular el peso.

También previenen enfermedades cardiovasculares, fortalecen el sistema inmunológico, fortalecen la flora intestinal, controlan el asma y fortalecen los bronquios y pulmones.

Beneficios Comunes

Regulación del microbioma intestinal. Ambos fomentan un equilibrio saludable en la flora intestinal, que es clave para la salud general.

Mejora del estado de ánimo y salud mental. Un microbioma saludable se asocia con menos síntomas de ansiedad y depresión.

Apoyo a la salud cardiovascular. Ambos tipos de kéfir pueden ayudar a reducir los niveles de colesterol y mejorar la presión arterial.

Receta de búlgaros x Cocina Vital

Ingredientes:

• 1 litro de leche bronca
• 1 frasco de vidrio, lavado y esterilizado
• 1 paño para cubrirlos
• 1 Liga grande
• Papel periódico

Procedimiento:

1. Calienta la leche en una olla de acero inoxidable, sin que hierva.
2. Deja enfriar.
3. Vacía la leche en el frasco previamente esterilizado.
4. Tapa con el paño y asegura con la liga.
5. Envuelve con papel periódico para protegerlo de la luz.
6. Deja fermentar por 20 días en un lugar seco y oscuro. No debes mover el frasco.
7. Durante los días de reposo debes revisar que no se haya contaminado, es decir, que no tenga hongos verdosos, grises, negros ni rosas y mucho menos los pelitos y polvo que se llegan a formar por estos. Si los tiene, debe desecharse y volver a preparar.
8. Revisa que después de los 20 días luzca como leche cortada, si es así, procede.
9. Cuela la preparación con mucho cuidado para evitar se rompan los pequeños grumos.
10. Listo, ¡ya tienes los tan anhelados búlgaros!

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