Por Daniela Ocampo
El pozole tiene raíces ancestrales y ha deleitado a generaciones con su delicioso sabor, pero un aspecto que siempre se toma en cuenta, en cualquier receta, es qué tan saludable es: ¿Cuál es mejor y más nutritivo, el pozole de pollo o de puerco?
Según el Sistema Mexicano de Alimentos Equivalentes (SMAE), un plato de pozole tradicional contiene alrededor de 228 calorías. No obstante, este valor puede variar en función de los ingredientes y las porciones utilizadas.
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Este exquisito platillo, también es una fuente de nutrientes esenciales, incluyendo carbohidratos, proteínas, grasas beneficiosas; así como minerales y vitaminas como el zinc, el potasio y la niacina.
¿Carne de puerco o carne de pollo?
Las carnes rojas, como ciertos cortes de cerdo, tienden a ser más altas en grasas saturadas y colesterol. Por otro lado, las carnes blancas, como la pechuga de pollo sin piel, son generalmente más magras y bajas en grasas.
Si para preparar el pozole en estas fechas priorizas tu salud, sin duda, la pechuga de pollo es la mejor opción, aunque ciertas partes de la carne del cerdo como el solomillo, también puede aportar gran valor nutricional.
Si quieres cuidar tu salud, te damos estos tips:
- Elegir carnes magras: Cualquiera que sea tu elección, opta por cortes magros para reducir el contenido graso.
- Incorporar verduras: Añadir verduras al pozole enriquece el platillo con fibra, vitaminas y minerales.
- Acompaña con tostadas horneadas: Al reemplazar las tostadas fritas con versiones horneadas, reducirás la cantidad de grasas poco saludables.
- Desgrasar el caldo: Elimina el exceso de grasa del caldo para hacer el platillo más ligero y saludable.
- Controlar las porciones: Limitar la ingesta a un plato y medio de pozole ayudará a mantener un equilibrio calórico adecuado.