La contingencia sanitaria ha sido una oportunidad para acercarnos a lo desconocido y para hacer de las cosas que nos apasionan nuestro mejor hobbie. Gabriela Fernández, fundadora de The Drunk Cake Co., encontró en la cuarentena una nueva oportunidad para explorar lo mejor de dos mundos: la chela artesanal y la repostería.
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Los inicios
The Drunken Cake Co. es una dark kitchen que nació en plena pandemia especializada en elaborar pasteles con cerveza artesanal. Una idea que se materializó después de que Gabriela Fernández encontrara inspiración en una noche de chelas y plática con amigos.
“Lo que quiero que recuerde la gente cada que prueben mis pasteles es un ambiente chido en el que la pasas bien con tus amigos mientras disfrutas de una buena chela”.
Gaby Fernández, fundadora de Drunken Cake.
Luego de múltiples recetas y variaciones en los ingredientes, Gaby logró la receta perfecta para crear cada uno de sus pasteles, los cuales dependiendo del sabor llevan diferentes tipos de chela artesanal.
Whitexican Stout y los demás sabores cheleros
Algo que nos encanta de los pasteles de The Drunken Cake Co., es que cada mordida lleva a un paraíso chelero diferente; aunque Gaby al principio se basó únicamente en cuatro tipos de cerveza, a lo largo del tiempo ha incursionado otros ingredientes y chelas nuevas para darle vida a otras versiones reposteras.
Su creación más reciente es el Whitexican Stout, un pastel que lleva como fondo una cerveza white stout de la Cervecería Mexicana Irreverente. “Ha sido una de las recetas más retadoras” nos cuenta.
“Le di como tres semanas vueltas a la receta, al final ya dije, lo que tiene que llevar sí o sí es la cerveza y azúcar para que no le robe protagonismo. Al final hice toda la mezcla; bajé la cantidad de azúcar exacta pensando en que la cobertura tenía que ser de chocolate blanco.”
Gaby Fernández, fundadora de The Drunken Cake.
Otros pasteles que desfilan dentro del catálogo de The Drunken Cake Co. es el Imposible Chocolate Stout, el cual está hecho a partir de este tipo de cerveza y un bizcocho de chocolate perfectamente equilibrado.
Si te late más lo dulce, te recomendamos que le entres al Sweet Milk Vanilla Cake, un tributo al desayuno que la mamá de Gaby le mandaba de chiquita, nada más y nada menos que un sándwich de cajeta conformado por galletas.
Este pastel lleva como base un bizcocho de vainilla coronado con una salsa dulce de cajeta, qué créenos, no tiene desperdicio.
El Lemon Butter Cake y el Honey Cake tienen sabores muy equilibrados, que puedes acompañar perfectamente con una buena cerveza para maridar y hacerle justicia.
El Honey Cake, está elaborado a partir de una cerveza de trigo, mucho más fresca y ligera, esta genialidad va acompañada de queso mascarpone mientras que el Lemon Butter Cake lleva en el bizcocho el toque de cerveza lager con una capa de glaseado de limón.
Una de las particularidades de este gran proyecto es que hay pasteles personalizados y de temporada. Próximamente, además de las delicias reposteras que los caracteriza, tendrán pan de muerto.
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