Comida miniatura: Receta de hot cakes digna de ternurines

Estos días más cercanos al fin del año, se antoja estarte consintiendo diario de diferentes maneras, y una de ellas es a través de la comida.

En redes sociales circulan videos de creadores dedicados a cocinar cualquier platillo en miniatura, que podría parecer incluso, comida para ternurines.

La comida miniatura siempre llama mucho la atención, debido a los detalles con la que es elaborada, pero sabías que también existen razones psicológicas, sensoriales y culturales que explican por qué atrae tanto:

Factor de ternura y estética: Los alimentos en este tamaño suelen verse adorables y muy atractivos. Al reducir el tamaño, se perciben como más “manejables” y, de alguna manera, más accesibles. Además, la miniaturización añade un toque visualmente interesante que hace que el platillo sea más tentador.

Sensación de control y moderación: Permite tener una experiencia de degustación sin sentirte demasiado lleno. Es ideal para quienes quieren disfrutar de varios sabores sin el compromiso de una porción grande. También da una sensación de control y moderación, ya que las porciones permiten disfrutar sin sentir culpa.

Diversión y novedad: La comida en miniatura trae consigo un sentido de juego. Al ser diferente de lo habitual, despierta la curiosidad y añade un toque divertido a la experiencia de comer.

Recuerdos infantiles y nostalgia: Da una experiencia reconfortante, que puede hacerte disfrutar más del momento.

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Receta de hot cakes miniatura

Ingredientes:

• 1 taza de harina de trigo
• 2 cucharadas de azúcar
• 1 cucharadita de polvo para hornear
• 1 pizca de sal
• 1 huevo
• 3/4 de taza de leche (puedes ajustar la cantidad para la consistencia)
• 1 cucharadita de vainilla (opcional)
• 1 cucharada de mantequilla derretida (o aceite)
• Mantequilla adicional para cocinar

Modo de preparación:

1. En un tazón, mezcla la harina, el azúcar, el polvo para hornear y la sal.
2. En otro recipiente, bate el huevo y añade la leche, la vainilla y la mantequilla derretida. Mezcla bien.
3. Agrega los ingredientes líquidos a los secos y revuelve suavemente hasta que la mezcla esté homogénea. Evita batir en exceso para que los hot cakes no queden duros.
4. Calienta una sartén antiadherente a fuego medio-bajo y añade un poquito de mantequilla o aceite.
5. Vierte pequeñas cantidades de masa (aproximadamente una cucharada) para que queden pequeños.
6. Cocina por aproximadamente 1-2 minutos hasta que veas burbujas en la superficie, luego voltea y cocina 1 minuto más o hasta que estén dorados.
7. Sírvelos con tus toppings favoritos: miel, chocolate, frutas frescas, crema batida o yogur.

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