Seguramente has probado algún platillo donde el ahumado es una de las técnicas más importantes para elaborarlo. Este consiste en poner una proteína —llámese pollo, cerdo, res o pescado— a una fuente de humo que proviene o se hace con maderas.
¿Pero cómo funciona este proceso? ¿Qué tipo de maderas se utilizan? ¿Cambia el sabor dependiendo la madera? Acá te contamos.
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¡Puro sabor a leña!
Aunque no lo creas, sí tiene mucho que ver la selección de maderas que se utilicen para preparar los alimentos, de esto dependederá el sabor final del platillo.
Encino
Se caracteriza por dejar un sabor muy intenso; por lo que se recomienda utilizarlo de forma moderada. De no hacerlo, la proteína o alimento que se esté preparando puede quedar amargo y cero comestible.
Nogal
Es una de las maderas más potentes que hay, se recomienda utilizarla en carnes rojas y con grasa media. Los quesos semicurados se aromatizan perfecto.
Mezquite
Es una de las más utilizadas debido a que es muy sencillo de encontrarla. Se utiliza principalmente para asar cualquier tipo de carne.
Durazno
Impregna de notas aromáticas y sabores dulces a los alimentos, es ideal para trabajar con carnes blancas como el pollo y el pescado.
Cedro
Es un tipo de madera bastante versátil y es ideal para cocinar pescados, lo único malo es que se consume muy rápido.
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