A más de 30 kilómetros de la capital de Oaxaca, se ubica Ocotlán de Morelos, ahí un mercado que atesora desde hace más de 80 años La cocina de Frida, de Beatriz Vásquez Gómez, también conocida como la “Frida oaxaqueña”.
El parecido con la pintora mexicana es hipnotizante y su local también, turistas de todas partes del mundo buscan acercarse a ella y de paso, probar sus platillos: el mole de almendras, los chiles encuerados o un nopal abierto relleno de verduras, inspirado en Kahlo.
Beatriz lleva siempre una trenza en la cabeza decorada con flores, vestidos autóctonos y un innegable parecido físico con Frida, hija de Matilde Calderón, quien se cree también era de Oaxaca.
“El peinado se lo debo a mi padre, él nos enseñó a usar flores, a las cinco hermanas. Cuando yo cumplí 12 años me trajo flores, desde ahí empecé a llevarlas (…) igual con mis faldas, voy a comprar tela. Se me hizo una costumbre andar de faldas largas y así bordo mis blusas y me gustan mucho)”, cuenta Beatriz.
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Además, comparte que la entrega, dedicación y amor a su trabajo, es otra de las similitudes que encuentra con la artista coyoacanense, “de la misma manera yo cocino con cariño para todas las personas que llegan a mi local”.
Aunque al principio —cuando la gente la detenía en la calle al confundirla con Kahlo—Beatriz no sabía a quién se refería, ahora nos cuenta que su frase favorita es “Lo que no me mata, me alimenta” y que la pintura que más le conmueve es Las dos Fridas.
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“Hace 14 años tuve un sueño, para mí fue algo muy hermoso. Soñé que Frida me envolvió en una sábana blanca con unas libélulas, mi insecto favorito. Cada libélula me tomó de una punta. Entonces ella y yo estábamos a la orilla de la presa (…) los animalitos me alzaron y yo le decía que tenía miedo, pero ella me decía «“No tengas miedo, tú vuela». Así volé sobre agua y la verdad que para mí eso fue como un permiso de ella, ese es el porque me gustan Las dos Fridas. Ahí nos vimos en algún momento juntas”, concluye Beatriz.
¡ A probar!
Dentro de los platillos más solicitados por los comensales, Doña Beatriz nos cuenta que están los moles tradicionales, el estofado, el coloradito, el mole almendrado y los chiles encuerados; estos últimos, elaborados con chile de agua, endémico de Oaxaca. “Va relleno de picadillo, envuelto en una tortilla y asado en las brazas”, cuenta en su perfil de Instagram.
Cortesía
Otra sugerencia del menú que nos hace la cocinera es el plátano enamorado, que se sirve sobre pétalos de rosas de colores y con mangos asados a las brasas .
Y el platillo que ofrece desde La Cocina de Frida , dedicado en la pintora mexicana, es el nopal asado, “lleva verduras adentro como cebolla, tomate, aguacate y cilantro. Algunas personas lo piden con queso arriba o huevo duro. Está inspirada en Frida por sus colores que tiene, desde el nopal que es un cactus, el rojo del tomate y también por los colores de la bandera”, cuenta en Aderezo.
Y por último, nos recomienda la carne frita en salsa, las enchiladas verdes y rojas y las deliciosas guías espesadas con tasajo los sábados.
Escucha aquí la charla con la cocinera en el podcast La Guía del Fin de Semana de la OEM
Dónde
La Cocina de Frida se ubica en la segunda etapa de el mercado Morelos N/8, en Ocotlán de Morelos, Oaxaca. Los horarios de de atención son de 8:00 a 18:00 horas.
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