La historia del chai y cómo preparar uno en casa

A veces por los cambios constantes de temperatura, es complicado elegir una bebida ideal para acompañar el día, pero te tenemos una buena noticia: el chai puede adaptarse fácilmente si se toma fría o caliente.

El chai es una palabra hindi que simplemente significa “té“. En su forma moderna, el masala chai (té especiado) es una bebida tradicional originaria de la India, donde se ha consumido durante siglos. La mezcla de té con especias aromáticas, leche y un endulzante se desarrolló como una adaptación local al té que los británicos introdujeron en India durante la época colonial en el siglo XIX.

El masala chai es una bebida profundamente arraigada en la cultura india, donde cada familia y región puede tener su propia receta específica. Aunque se popularizó en India gracias a los británicos, las especias han sido una parte integral de la cocina y la medicina india durante miles de años.

Esta bebida también es un símbolo de hospitalidad y comunidad en India, frecuentemente servido por chaiwalas, personas que preparan y venden té en las calles. La popularidad global del chai ha llevado a su difusión en diversas formas, incluyendo variantes como el chai latte, que es popular en cafeterías de todo el mundo.

Actualmente esta bebida ha llegado a casi todas las cafeterías y encontramos gran diversidad de recetas para poder experimentar hasta encontrar nuestra favorita. Te dejamos aquí una para que lo intentes desde la comodidad de tu casa.

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Receta para preparar chai casero

Ingredientes:

• 2 tazas de agua
• 2 tazas de leche (puede ser de vaca, almendra, soya, etc.)
• 2-3 cucharadas de té negro en hojas o 2 bolsitas de té negro
• 4-6 vainas de cardamomo
• 1-2 ramas de canela
• 4-6 clavos de olor
• 1 trozo de jengibre fresco (aproximadamente 2 cm), pelado y rallado
• 2-3 granos de pimienta negra (opcional)
• 2-3 cucharadas de azúcar o miel (ajustar al gusto)

Instrucciones:

1. Romper ligeramente las vainas de cardamomo para liberar las semillas. Puedes aplastar un poco las ramas de canela y el jengibre para intensificar los sabores.
2. En una cacerola, mezcla el agua, las especias (cardamomo, canela, clavo de olor, jengibre, y pimienta negra si se usa) y lleva a ebullición. Reduce el fuego y deja que hierva a fuego lento durante 5-10 minutos, permitiendo que las especias liberen todo su sabor.
3. Añade el té negro a la mezcla de especias y deja que hierva a fuego lento durante unos 3-5 minutos más. Si te gusta un té más fuerte, puedes dejarlo más tiempo.
4. Agrega la leche a la mezcla y deja que la bebida se caliente a fuego medio, evitando que hierva para que no se corte la leche.
5. Añade azúcar o miel al gusto, removiendo bien para que se disuelva completamente.
6. Cuela el chai para eliminar las hojas de té y las especias. Sirve caliente.

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