Olga Cabrera Oropeza, cocinera mixteca y directora del restaurante Tierra del Sol Casa Restaurante, es una mujer carismática y orgullosa de sus raíces, honra su cultura y tradiciones a través de la comida, reflejo de la herencia de las mujeres más importantes de su vida, su bisabuela, su abuela, su madre y su suegra.
La cocina es el punto de encuentro de la unión familiar, en ella convergen, los cocineros, los aprendices, los chismosos y los tragones; en cualquier cultura alrededor del mundo la comida forma parte fundamental de las tradiciones.
Según la tradición mixteca las niñas desde muy pequeñas ayudan a los quehaceres de hogar, las mujeres mayores como abuelas, madres y tías, tienen la obligación de enseñarles a cocinar alas más pequeñas; pero al crecer y contraer matrimonio, las cosas cambian, porque las mujeres tienen el deber de aprender a cocinar lo que la suegra guisa, porque aunque se pertenezca al mismo pueblo, cada señora cocinan diferente. La tradición dicta que una buena nuera es aquella que consiente al hijo preparándole lo que le gusta comer, de esa manera, las mujeres son bien aceptadas por la familia del esposo.
“Hoy agradezco mucho a mi suegra sus enseñanzas la admiro y quiero mucho”, comenta Olga Cabrera.
En este contexto, Olga en Tierra del Sol Casa Restaurante ofrece un cocina tradicional, familiar y muy auténtica, en la que incluye platillos de la región de la Mixteca con los que más que alimentar el estómago, sin lugar a dudas, alimenta el alma.
Además el restaurante es encantador, de entrada te recibe un olor inigualable a pan que recorre toda la calle, pues al entrar hay una panadería. Luego viene una barra inmensa donde se hace el nixtamal y se están haciendo todo el tiempo tortillitas a mano, conforme vas subiendo las escaleras los olores te hacen salivar poco a poco y al final llegas a una terraza de donde puedes observar las montañas de un lado y la hermosa ciudad de Oaxaca por el otro.
En este lugar Olga ofrece una cocina mestiza en la que confluyen el maíz y el chile, dos ingredientes indispensables de la gastronomía mexicana. Puedes encontrar delicias como las famosas tetelas rellenas de frijoles y hoja santa, queso rallado y salsa de chile puya con jitomates tatemados y martajada en molcajete, sopa de guayas y como buena región oaxaqueña, la mixteca tiene una variedad innumerable de moles. Entre los platos favoritos heredados por su abuela en vida, están el mole de fiesta y la torta de camarón seco. Dos delicias que obviamente encuentras en su menú.
Y uno de sus platos favoritos aprendidos de su suegra es el huachimole también conocido como huaxmole o mole de caderas. Este es un guiso de temporada muy tradicional que merece un festival cada año en el mes de octubre.
Olga nos cuenta que lo más disfruta cuando cocina son los olores y trabajar con chiles, “me gusta que mi comida pique y pique rico”. Agrega.
La cocina mixteca es una herencia de mujeres y por eso, ella sigue con la tradición de transmitir el legado de su tierra no nada más a su familia, sino internacionalmente. Finaliza diciendo que para lograrlo, primero nunca dejará de cocinar la comida tradicional, jamás olvidará sus raíces y seguirá investigando sobre las muestras vivas de la gastronomía para que sigan estando presentes.