Por primera vez en siete años, la cafetería de especialidad Alma Negra trajo a la Ciudad de México, café yemení. Lo hace desde el reconocimiento a la historia de esta región del planeta, una que tiene origen en el siglo XV cuando llegó proveniente de Etiopía. Ahí surgía la que fue y sigue siendo la bebida más popular del mundo.
Cuáles y cómo usar los métodos de extracción de café
Aunque en ese entonces los árabes construyeron un monopolio, en el que incluso hervían las semillas de café para que no pudieran sembrarla en otro lugar, actualmente espacios como Alma Negra, enfocados en el grano de especialidad hacen posible beber una taza (o las que quieras).
Este café que ahora puedes probar, es de beneficio natural que de acuerdo con Octavio, socio fundador de Alma Negra, tiene un carácter afrutado y es común en las regiones donde hay escasez de agua.
Una de las características de esta cafetería es que promueve también lo hecho en México, por eso, en la presentación oficial del fruto yemení, Octavio comentó para Aderezo, la relación estrecha que existe con estados como el de Michoacán, específicamente en el municipio de Uruapan.
Todo comenzó, dijo, cuando el general Michelena fue descubierto en la Conspiración de Valladolid (1809), “Él fue presidente interino entre el Primer Imperio y la primera República, o sea después de Iturbide. Fue descubierto y tuvo que irse a España; allá viajó por toda Europa y llegó a la Península Arábiga en donde consiguió semillas de café yemení. Luego llegó a Uruapan cuando regresó de su exilio. Prácticamente podemos hablar de que tenemos tradición cultural y genética de café yemení en Michoacán”, explicó Octavio.
De Uruapan este café se fue a Guerrero – México tiene tres entradas principales de café: Veracruz, Michoacán y Chiapas– y ahí es donde está el vínculo.
Además, para rematar la idea, Alma Negra “marida” el café yemení con la novela Monje de Moka de Dave Eggers, de la editorial Random House, “es una historia real novelada de un chico de San Francisco de ascendencia yemení quien regresó a su país para recuperar el cultivo ancestral del café y se vio atrapado en la actual guerra civil”, comentó Octavio.
También puedes estas historias con café:
- Entre el pedal y la taza de café
- Cafeterías para hacer home office
- Cata tu taza de café en tres sencillos pasos
Ambas historias —el café y el libro—, los puedes adquirir en las sucursales de Alma Negra. Ya sea una taza preparada o por kilo. Hasta agotar existencias.
Y ya, para rematar estas sincronicidades, Octavio cuenta que la primera cafetería que abrieron justo se ubica en la colonia Narvarte, que a su vez, destaca por tener palmeras originarias de Etiopía, un regalo a México por parte de Haile Selassie, el último monarca de la Dinastía Salomónica.
¿A qué sabe?
Los granos de café yemení fueron tostados directamente en Almanegra Café, “para que sea servido sin alterar su sabor complejo y extraordinario, que se distingue por sus notas a tierra, con una delicada dulzura afrutada y de cocoa; caracterizado por su inconfundible aroma a tabaco dulce, a especias de Chai, durazno seco, ciruela y plátano, que evocan la acidez propia de una uva”, mencionan.
Solo hay 50 kilos, así que no tardes si quieres probar este café. Además, si quieres acompañarlo con el libro, el combo cuesta poco menos de 500 pesos.
Dónde
Tienen cuatro sedes: Portales, Escandón, Narvarte y Roma. Ubica aquí la más cercana a ti.
Te invitamos a visitar nuestro perfil de Instagram:
Y para llegarte por el oído, escucha nuestro podcast de Aderezo: