Vanessa Hernández | El Sol de León
Ubicado en una de las ex-haciendas más antiguas de México en los límites de León, Guanajuato y Lagos de Moreno, Jalisco. Hacienda Jaramillo de Abajo, data de 1550 en los documentos manuscritos relativos a la fundación de esta hacienda, se precisa que esta Hacienda surge a través de un regalo de tierra que otorgó el virrey de la Nueva España don Antonio de Mendoza al capitán y conquistador de Tenochtitlán: Juan Jaramillo encomendero de Jilotepec, esposo de la famosa doña Marina o La Malinche, la intérprete del conquistador Hernán Cortés.
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Su historia
Estas tierras fueron donadas a Juan Jaramillo, poco a poco se fueron fraccionando hasta llegar a como se encuentran en la actualidad. El origen de la hacienda Juan Jaramillo es un personaje que casi no es mencionado en la historia, pero fue un hombre muy importante, uno de los primeros generales de Hernán Cortés y su aliado.
En la historia La Malinche, destacó por ser estratega, traductora, confidente y amante de Hernán Cortes, incluso tuvieron un hijo, cuando Hernán ya no la pudo proteger porque se iba ir de la Nueva España, se quedó sola y desprotegida, con muchos enemigos, por eso se la encomiendan a uno de sus mejores amigos, el elegido fue Juan Jaramillo, le prometió su libertad y se la concedió casándose con ella.
Es un templo
La capilla es de lo poco original que se conserva de la hacienda. En los últimos años se ha tenido una ardua labor de restauración, hay piezas que no son exactamente del siglo XVI, pero es una capilla que tiene valor agregado porque tiene un cristo de la Ascensión, y está consagrada.
Su fiesta se celebra 40 días después del Sábado de Gloria, porque es la fecha cuando Cristo asciende, se le atribuyen muchos milagros. Su cristo está tallado en una sola pieza del siglo XIX, normalmente los crucifijos son uniones, a la fecha cada sábado se ofician misas y se renta para eventos privados.
Como costumbre se le colocan medallas y fotos para pedirle un milagro.
“Antes de que en el mundo hubiera jardín, vid y uva; nuestra alma estaba embriagada de vino inmortal”, Rumi.
Y claro, también es un viñedo
En entrevista para Organización Editorial Mexicana, María José Fernández de Castro Martínez, gerente del viñedo Tierra de Luz Hacienda Vinícola, comparte cómo decidieron que un lugar tan histórico, una parte se convirtiera en un viñedo que invita a salir de lo cotidiano y buscar una conexión superior con la tierra, la luz y el vino.
Actualmente cuentan con 5 hectáreas de plantación de vid, su proximidad con la sierra genera vientos suaves y microclima continental, con acentuados cambios de temperatura entre día y noche, que favorecen la maduración de su uva.
El proyecto del viñedo arrancó en el 2015 con su plantación y se abrió al público el año pasado por su ubicación cuentan con una altitud de 1,983 MSNM.
5 hectáreas de pigmentación en las que tienen las siguientes variedades: merlot, malbec, vino gris, nebbiolo, todas en producción. Albarillo y semillón, aún en cosecha.
Con un rendimiento de 6 toneladas por hectárea, producen aproximadamente 30 hectáreas por año.
El vino guanajuatense
Uno de los detalles que más destaca son sus barricas con una capacidad de 225 litros, solo una es americana, todas las demás son francesas, eligen esas porque aportan ciertos aromas ya que en la barrica se realiza el proceso de crianza.
La también sommelier señaló que Guanajuato, actualmente en el tema del vino se encuentra en etapa de aprendizaje: “Prácticamente todos los viñedos en el estado son jóvenes. Todos estamos aprendiendo ¿Cuál es la variedad que mejor se adapta? ¿Cuáles son las temporadas de riesgo de heladas, de mayor lluvia, tratamientos efectivos, tendencias algunos se están tornando hacer orgánicos, biodinamicos?”
Producción en aumento
La buena noticia es que cada año crecen los números de hectáreas plantadas y por ende de viñedos al público. Indicó que la concentración de los vitivinicultores del estado está en entender el clima, las lluvias, ya que hay ciertas variedades susceptibles, otras no y en la educación del consumidor de cuál es el clima y cuál es el vino que se va fabricar y tomar en función del clima.
Para María José no existe competencia aún, piensa que el sol sale para todos y más cuando se tiene un consumo nacional que va en aumento y el vino nacional no es suficiente y eso se traslada a regional y local, tampoco es suficiente.
Mencionó que afortunadamente el sector agrícola fue de los pocos que no paró durante la pandemia.
Calendario VID
Enero:
Poda en Invierno.
Febrero:
Lloro, abono orgánico.
Marzo – Abril:
Inicio de ciclo, brotación, riego.
Abril, mayo y junio:
Floración y cuajado. Formación, rastrear, fumigación, riego.
Julio – Agosto:
Deshierbe, seguimiento de la maduración de la uva, cata de uva.
Septiembre:
Vendimia.
Octubre – Noviembre:
Caída de la hoja. Retirar mallas para granizo.
Diciembre:
Reposo de la vid.
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