Dicen que viajar es vivir y si igual que para mí, el té es parte primordial en tu vida ¡no olvides llevarlo por el mundo! Si bien, el té es un ritual cotidiano y cuando viajamos queremos descubrir y conocer cosas distintas, he aprendido que tener nuestro té favorito a la mano, nos hace sentir acompañados de algo familiar que nos da calor y apapacha el alma, además, nos permite seguir disfrutando del placer de relajarnos y tener momentos de calma, incluso en medio de una gran aventura.
Hoy te cuento sobre eso que no puede faltar en tu maleta si eres un amante del té.
- El té: Elige bien tus batallas y lleva eso sin lo que literalmente “no podrías vivir” y por supuesto que puedes vivir sin ellos, pero en realidad no quieres porque son parte de tu día a día. Elige presentaciones pequeñas considerando que lo tomarás a diario pero sin llevar de más, que cierren perfectamente bien y que ocupen poco espacio. En mi caso, me gusta iniciar las mañanas con pu’er (té post fermentado) y un cuenco de matcha…. sin ellos, siento que el día aún no comienza. Yo viajo con presentaciones no mayores a 50 g y, en ocasiones, en viajes largos llevo 2 versiones de pu’er, un puro y un blend, por si se me antoja con un poco de leche. En mi último viaje aprendí que sí o sí debo llevar matcha pues no es fácil de encontrar el grado o calidad que me hace feliz.
- Termo insulado: Que funcione tanto para llevar agua caliente o prepararlo ahí, por lo que es necesario que tenga canastilla de infusión, además de filtro o colador. Mi recomendación es termo de 500 ml.
- Set de viaje: A pesar de que podemos infundir el té directamente en el termo, personalmente disfruto de seguir creando mis rituales diarios y, por ello, desde hace años viajo con una versión portátil que incluye tetera con infusor y dos cuencos para poder compartir con mi compañero de aventuras. Te recomiendo una versión compacta con estuche rígido que ocupe poco espacio y proteja las piezas. Soy fan de la cerámica esmaltada, no porosa, para poder infundir de todo un poco.
- Hervidor de agua: Porque no en todos los hoteles hay y tampoco todas la ciudades cuentan con fuentes de agua caliente ¡verdaderamente indispensable que sea compacto!
El caso de que seas matcha amante del matcha como yo, hay varias opciones:
- Set básico para matcha: Chawan, chasen, chashaku y chakoshi / Cuenco, batidor, cuchara y colador
- No llevar chawan y aprovechar alguna taza o tazón que encuentres en el camino
- No es la opción más ortodoxa, pero puedes agitarlo dentro del termo y aprovechar el infusor para generar aire con el movimiento e integrarlo. No olvides respetar la temperatura adecuada para el matcha, 60º
- Bonus feliz: Existe un termo especial para matcha con chasen integrado que amarás
Sé que tienes algunas preguntas sobre la forma de llevar todo esto si tomarás un vuelo. Todo, absolutamente todo puedes llevarlo en tu carry on o si eres fan de preparar té en el avión o en los aeropuertos mientras esperas el tiempo de escala, por supuesto que puedes llevarlo en el bolso de mano o backpack sin restricción alguna. Es muy importante que el té vaya correctamente etiquetado.
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Lo que NO puedes hacer es llevar un cuchillo para pu’er, debes llevarlo ya porcionado. También evita llevar utensilios que al pasar por la zona de seguridad, parezcan peligrosos o punzocortantes (aunque sean de madera).
Claro que, además, DEBES probar todo lo que encuentres en el camino y si algo te encanta, no olvides comprar algunos gramos para llevar a casa. En caso de que compres algún set de té, envuelve pieza por pieza con tu ropa y acomódalo cuidadosamente en el carry on, evitando cargar con la cajas y empaques originales que ocupan mucho espacio. También puedes llevarlo en tu bolso o backpack sin temor a que sea confiscado.
Abrazos en taza, Denisse Díaz
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