Si te has preguntado qué debe comer tu perrito o qué no se puede, debes saber que la alimentación es uno de los pilares fundamentales para garantizar su salud y bienestar. Para asegurarle una nutrición adecuada, Ernesto Ávila, médico veterinario zootecnista, brinda algunas recomendaciones para alimentar a los caninos.
Primero, hay que determinar la cantidad de alimento que necesita tu peludo amigo, este paso puede ser con ayuda de tu veterinario ya que hará un cálculo de calorías necesarias en proporción a su peso metabólico. De hecho, varias marcas de alimentos comerciales ya incluyen tablas de recomendaciones en su empaque, ya sea según el peso, la etapa de vida y la actividad física de tu mascota.
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Lo segundo, muy importante, es que no es recomendable darle comida de humanos ya que varios alimentos pueden ser tóxicos y causar malestares en su organismo. También es clave, tomar en cuenta la existencia de croquetas específicamente formuladas para diferentes etapas de vida, tamaños y condiciones de salud. Así que hay que elegir las que mejor se adapte a las necesidades de tu peludo.
Si una dieta exclusivamente compuesta de croquetas te inquieta, debes saber que no todos los alimentos son dañinos, pero sí hay que tener precaución y cuidado. La organización Animal Trust de Reino Unido dice que además de carnes, estos animales pueden consumir lo siguiente:
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Por otro lado, el Dr. Ávila subraya que una buena nutrición puede contribuir a una mayor longevidad y mejorar su calidad de vida. Entiende que muchos amantes de los perros estén preocupados por su alimentación y deciden hacer preparaciones de comida especial, por ende, el uso de comida “humana”, además del auge de las dietas BARF. La ventaja más grande de estas preparaciones es su palatabilidad, es decir, que tu perruno amigo va a disfrutar comerlas, pero también menciona las desventajas:
“Para poder hacer un alimento balanceado, difícilmente vas a hacer derivadas, cuadrados de Pearson, para saber exactamente cuánto le vas a dar de proteína, grasa, hidratos de carbono, minerales y microminerales. Difícilmente vas a poder definir si hay un exceso o carencia de energía, entonces también son alimentos que llegan a producir pacientes obesos y es una de las enfermedades que más llegan a la clínica veterinaria. Esto produce problemas cardiacos, diabetes mellitus, afecciones osteoarticulares, ya que son pacientes que tienen mucha más grasa, y tienen más riesgo cuando entran a quirofano. Bueno, otra desventaja es que será difícil cocinarle al perro todos los días, y claro, es mucho más caro”.